martes, 27 de noviembre de 2012

Los niños se mueven mucho y no teorizan al respecto, los adultos piensan mucho y se mueven poco

Normal y aparentemente, los niños se mueven mucho y sin pensar tanto, logran llegar al lugar que ellos han estado observando y llama su atención, repitiendo los movimientos hasta que pueden tomar aquello que deseaban. Aún no se ha visto que un recién nacido pueda hablar, cantar, contar, caminar, hacer cálculos matemáticos, parase en dos pies. Todo ese aprendizaje es producto de cientos de repeticiones. ¿Qué pasa con todo este esforzado aprendizaje? ¿En que momento deja de moverse con esa facilidad infantil ? ¿cuándo comienza  a pensar más y a moverse menos?
Lo que está claro es que, movimiento es la clave en la vida. Desde que el ser humano habla, ordena todo lo que encuentra en su camino de acuerdo a como se mueve. Distintas formas de vida se mueven de diferentes maneras, como las plantas, que se mueven hacia la luz;  la forma de moverse es la que le da las características que el ser humano utiliza para clasificarlas, como por ejemplo, todo lo que vuela es ave, lo que nada es pez, lo que se arrastra es serpiente. Algunos gatean, otros saltan, hay quienes escalan y quienes andan en cuatro pies y también algunos que andan en dos patas. Al parecer, el movimiento ha interesado al ser humano desde que se sabe que se sabe.
El movimiento se realiza en un espacio, a distintas horas y en un medio que siempre tiene la misma connotación biospsicosocial y casi nunca una diferente, el movimiento del esqueleto lleva consigo a los músculos y al sistema nervioso. Con el movimiento el organismo cambia de lugar.
Organismo es: esqueleto, músculos y sistema nervioso más todo aquello que ayuda a alimentarlo, a calentarlo, a activarlo y a relajarlo.Esos movimientos producen un desplazamiento en el espacio del organismo en general, es decir, cambia la posición de unas partes en relación con las otras para poder realizar las actividades que son necesarias para lograr influir en los distintos ambientes en los cuales el organismo logra lo necesario para vivir. La vida no es posible sin movimiento.
Inspirado en "La dificultad de ver lo obvio" Moshe Feldenkrais









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